Estos días varios vecinos nos han preguntado, interesados por las distintas formas de presencia del agua como recurso ornamental en los grandes parques de Valdebebas, que se podrán visitar cuando se abra el Parque Forestal, hito que el Ayuntamiento de Madrid ya ha anunciado para abril de 2015 y, por otro lado, se ejecute el Parque Central, objeto del concurso internacional de ideas que ganó el proyecto Sol y Sombra. Hoy tratamos el tema del agua ornamental en profundidad.
Sabido es que el Parque Forestal de Valdebebas presenta una forma parecida a un árbol. La ?copa? de ese árbol se desarrolla en torno al eje central del parque, y está dividida en cuencas surcadas por suaves vaguadas, llanos y lomas que representan paisajes vegetales característicos del centro peninsular: Sistema Ibérico, Montes de Toledo, Sistema Central, La Alcarria y La Mancha. Cuando se abra el Parque, los madrileños podrán disfrutar de varios cauces ornamentales dispuestos a lo largo de la superficie de la ?copa?, y un embalse para recoger las aguas de escorrentía del propio parque, contribuyendo de esta manera al autoabastecimiento de recursos hídricos y, por tanto, al ahorro de agua.
Una de las cinco cubetas que conforman el arboreto central contará con agua para la generación de islas recorridas por pequeños puentes de madera. Las otras cuatro están rellenas de arena, arcilla, gravilla y praderas.
El río: se va a asentar en una vaguada que recorre de norte a sur el parque en paralelo a la Vía Pecuaria, en el límite con el futuro Parque Central. En la vaguada se reproducirá un cauce ornamental que recreará la morfología de un río. El agua y sus ecosistemas asociados serán aquí, pues, los protagonistas. La vaguada que alberga el bosque fluvial queda salvada por dos pasarelas metálicas con pavimento y barandillas de madera.
El proyecto del Parque Central, Sol y Sombra, cuenta también con una importante superficie lacustre, de nivel variable, que se abastecerá por la recogida de las aguas de escorrentía.
El agua es, en todo el ámbito, especialmente importante, y el objetivo en Valdebebas es su gestión integral, pues se crea un sistema basado en la diversificación de orígenes, la regulación y el aprovechamiento de los recursos propios. Se va a recurrir a sistemas de riego eficientes y de bajo consumo y al empleo de agua regenerada, así como a sistemas de recogida de agua de lluvia para procurar el máximo autoabastecimiento.
Todo ello forma parte de una concepción del paisajismo que compatibiliza el uso racional de los escasos recursos hídricos de nuestra zona geográfica con un rica y variada presencia del agua en láminas, estanques y corrientes de gran valor paisajístico y didáctico.